Me encanta como los colores cuando hay viento y agua se avivan, no es broma, el cielo se pone gris pero los colores tienen un brillo especial. La tormenta de hoy no permitió más que a ratos que pudiera hacer fotos, pero durante un ratito me acerqué al muelle de Astano y la verdad es que estaba precioso, casi no podía mantener la cámara fija con la velocidad del viento, pero asistir a la actuación de las fuerzas de la naturaleza bien vale un esfuerzo.
¡Qué chulas! Pues sí que debe ser verdad lo de que la falta de sol directo aviva los colores porque la de la barca azul envejecida podría servir para un anuncio de pinturas. (lo digo sin acritud, eh)Me encanta.
ResponderEliminarUn beso¡¡¡