Desde el pequeño pantalán que se adentra en la ensenada de La Gándara hay una vista de 360º del paisaje que la rodea, y os comento, que no es una experiencia nada edificante. La marea estaba baja, demasiado baja para mi gusto puesto que en todo momento se veía el fondo fangoso y lleno de desechos del peor de los gustos, no doy más pistas, sólo decir que únicamente se asomó un miedoso munjel (no se si se escribe así) como representante de la fauna marina. Esto abajo, pero arriba la cosa no está mejor, vi los montes Ancos y Marraxón en cuyas faldas no queda sitio para un edificio más, vi el polígono de La Gándara de dónde salen un montón de desagües que acaban en estas aguas, vi como el puente de las Pías hace de tapón e impide la correcta salida-entrada de las aguas de la ensenada, vi, en fin el presagio de una difícil recuperación de este, antes, especial entorno.
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Viste todo eso, sí, pero no es en realidad en lo que te fijaste. Lo que describes es descorazonador, pero tus fotos muestran que todavía puede quedar esperanza.
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